Guía para crear experiencias agroturísticas

¿QUÉ ES UNA EXPERIENCIA AGROTURÍSTICA Y QUÉ GANAS PONIÉNDOLA EN MARCHA?

Los turistas están pasando de ser consumidores a experimentadores que desean vivir sensaciones auténticas con personas, lugares y culturas diferentes a las suyas. Y en este escenario, las actividades agropecuarias juegan un papel importante. De hecho, el agroturismo, además de transmitir a los visitantes el conocimiento de agricultores y ganaderos, promueve el desarrollo rural y la sostenibilidad ambiental.

¿Y a qué llamamos experiencias agroturísticas? A actividades relacionadas con el sector primario que pueden ser muy variadas: aprender a cuidar del ganado, sumergirse en el mundo del vino visitando bodegas, adentrarse en un olivar ecológico y hacer una cata maridada de aceites, descubrir los secretos de la pesca tradicional, hacer un taller de cocina con setas, descubrir cómo se cultiva el azafrán… Estos son solo algunos ejemplos de las múltiples posibilidades que existen.

La clave está en que las experiencias que ofrezcas sean capaces de transmitir sensaciones inolvidables a los visitantes para que tras vivirlas quieran recomendarlas.

ANTES DE COMENZAR

Antes de poner en marcha una experiencia agroturística es importante que estudies qué ofrecen los competidores para obtener pistas sobre experiencias similares que estén funcionando. También es fundamental que evalúes los costes, la dedicación y la disponibilidad de proveedores. Además, siempre conviene que te plantees con qué objetivo quieres ofertar tu experiencia: ¿que no se pierda el saber hacer tradicional de tu tierra?, ¿contribuir al turismo en tu zona?...

Por otro lado, debes tener en cuenta que diseñar una experiencia agroturística implica dedicar tiempo para que los visitantes se sientan cómodos y bienvenidos. Muchos turistas no provienen de un entorno agrícola o ganadero, por lo que harán muchas preguntas para comprender bien la actividad. La hospitalidad es clave en este aspecto.

¿QUÉ TIPO DE PÚBLICO QUIERES O PUEDES RECIBIR?

Tus clientes pueden ser muy variados: desde turistas que visitan el destino por primera vez hasta clientes potenciales que viven en tu mismo entorno. Además, existen múltiples perfiles o tipos de turistas con diferentes intereses que siempre conviene conocer para adaptar convenientemente la experiencia a tu público:

• Familias con niños: ten en cuenta que buscan actividades que resulten interesantes para los más pequeños de la casa y que valoran mucho que las experiencias sean educativas, pero también lúdicas. La idea es que los padres sientan que contribuyen a la formación de sus hijos y que estos últimos se diviertan y cuenten lo vivido a sus amigos. ¿Un ejemplo práctico? Una granja productora de lácteos puede organizar una experiencia para que los niños aprendan a elaborar quesos o yogures y disfruten interactuando con los animales. Al final, puedes regalar algún detalle a la vez que dejas tiempo para la compra de tus productos.
• Parejas o adultos sin hijos: buscan actividades complementarias a sus viajes, ya que son grandes consumidores de tiempo de ocio y mayor flexibilidad temporal. Al contrario que el grupo anterior, por lo general no quieren compartir su espacio con niños, pero sí valoran otros aspectos como la originalidad o poder participar con la sostenibilidad del territorio.
• Pequeños grupos de amigos: buscan pasar un buen rato en compañía a la vez que disfrutan del medio natural y contratan las experiencias como complemento a otras actividades. Aunque no te exigirán un contenido técnico perfecto, si valoran adquirir conocimientos durante la experiencia.
• Adultos + de 55: profesionales, prejubilados y jubilados: suelen ser personas experimentadas y tranquilas a los que les gusta comprar productos locales, mantener las tradiciones, interactuar con los residentes... Valoran el entorno paisajístico en el que se desarrolla la actividad y su autenticidad.
• Otros perfiles: grupos de escolares, profesionales o estudiantes de materias relacionadas con el sector primario, viajes de incentivo para empresas…

Lo más importante es que tengas claro si la experiencia se puede dirigir a uno o varios de estos grupos para crear un relato en base a sus intereses y diseñar la experiencia más adecuada.

¿CÓMO SE DISEÑA UNA EXPERIENCIA AGROTURÍSTICA?

Una vez que hayas elegido cuál es tu público objetivo, ya podrás empezar a diseñar tu experiencia. ¿Cuáles son los factores clave a la hora de crearla?

• Describe tu actividad de una forma detallada: ¿qué van a ver, oler o tocar los turistas? Si se ofrece una degustación, ¿en qué va a consistir exactamente? ¿Los visitantes van a aprender o a descubrir algo nuevo? Apela a todos sus sentidos para lograr atraer su interés y pon el foco en lo que hace especial a tu oferta.
• Define bien el formato de consumo: los turistas deben tener claro cuestiones como si lo que ofreces se trata de una visita libre o autoguiada o una combinación de ambas, si hay un número mínimo de personas para que se pueda llevar a cabo la experiencia o si hay aforo limitado que garantice que la actividad va a ser satisfactoria para todos. Incluso puedes ofrecer una experiencia privada.
• Si existe alguna recomendación o advertencia advertencia como la necesidad de llevar una vestimenta adecuada o precaución por alergias o condición física, transmítelo con claridad a tus clientes.
• Indica con exactitud la duración de la visita: además de cual es la extensión de la propia experiencia, los turistas necesitan saber si esta está disponible todos los días, solo los fines de semana, en temporadas concretas dependiendo de tu producto…
• Concreta los métodos de reserva y de pago:: es conveniente que colabores con la entidad gestora del turismo del destino, además de con agentes locales turísticos, así como con entidades dinamizadoras del sector primario en el destino tales como Denominaciones de Origen, Indicación Geográfica Protegida, Grupos de Acción Local, etc. Así los turistas tendrán varías vías a la hora de reservar la experiencia.

Una vez tengas claros todos estos puntos, podrás desarrollar la narrativa o guion de tu experiencia siempre con información útil y actualizada. Define un estilo de comunicación con el que te sientas cómodo, conecta con las motivaciones de tus clientes, utiliza un lenguaje fresco y directo e intenta siempre transmitir emociones. Es fundamental acompañar los textos que crees para describir tu experiencia con imágenes en las que aparezcan personas disfrutando de una manera natural, ya que las fotografías de lugares vacíos no transmiten buenas sensaciones.

¿QUÉ TIENES QUE HACER PARA PONERTE EN MARCHA?

En primer lugar, antes de ponerte en funcionamiento, ten siempre en cuenta los aspectos más prácticos como comprobar que se cumple la normativa aplicable a la explotación y a la actividad, especialmente importante cuando se trata de producción de alimentos o se interacciona con animales. Además, piensa siempre en la seguridad de tus clientes en las instalaciones.

También es importante que elijas bien quién va conducir y participar en la actividad. Lo ideal es que se trate de una persona que tenga los conocimientos adecuados para transmitir los valores de tu experiencia y disponga del tiempo necesario para hacerlo.

En segundo lugar, una vez diseñada la experiencia, es fundamental promocionarla a través de varias posibles vías:

• Establece colaboraciones con los agentes turísticos de tu zona zona (gestores turísticos, oficinas de turismo, agencias y plataformas de venta de experiencias, etc.) que te ayuden a difundirla e incluso a crear paquetes turísticos.
• Crea un sencillo folleto distribuyéndolo entre clientes y actores turísticos.
• Organiza una jornada de puertas abiertas, acude a eventos y mercados locales donde ofrecer tu experiencia e informa sobre la misma a medios de comunicación locales.
• Plantéate la opción de publicar una página web con información cuidada y actualizada como escaparate de tu actividad. Posiciónala en buscadores a través de las keywords (palabras clave) correctas y valora instalar un sistema de gestión de reservas online.
• Crea perfiles de la empresa en redes sociales que te ayuden a mejorar la visibilidad en los buscadores de internet y a incrementar las visitas a tu web.

Una vez dados todos estos pasos, llegará el momento de hacer un seguimiento de los resultados para ver si se han conseguido los objetivos marcados. Si es necesario, rediseña tu actividad teniendo siempre en cuenta la opinión de los visitantes tras sus vivencias.

Muchas empresas ya se han lanzado a crear experiencias envolventes que giran en torno a sus productos y su saber hacer. Todas ellas son ejemplo de reinvención e innovación. Ahora es tu turno. Descarga aquí una completa guía con toda esta información ampliada, con un práctico glosario y con herramientas útiles para poner en marcha tu experiencia.

Aquí también encontrarás un catálogo de experiencias destacadas que ya están funcionando (puedes tomar ideas y comprobar que tu negocio sí puede tener interés para los turistas) y toda la información sobre este proyecto.